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Miel de Brezo
La miel de brezo es miel monofloral. Se recolecta en alta montaña en la meseta y cordilleras del norte de España. Es una miel producida a partir del néctar de las flores rosadas del brezo.
El brezo es una planta decorativa que cubre el suelo, una planta muy conocida por las abejas desde hace mucho tiempo. Esta planta rústica, de reducidas dimensiones, se adapta tanto a acantilados y páramos como a macetas y jardineras, siempre que disponga de espacio y esté bien expuesta al sol.
Sus características
Características de la Miel de Brezo
- Textura: cremosa, recuerda a la gelatina.
- Consistencia: muy espesa, incluso almibarada. Debes saber que una vez cristalizada, la miel se convierte en pequeños cristales, de hasta 2 a 3 mm de diámetro. Signo de la perfecta pureza de la miel
- Oscuro: Es una miel marrón que tira del rojo.
- Aroma: muy marcado.
- Sabor: Muy potente, ligeramente amargo y áspero. Con un sabor a caramelo bastante pronunciado.
- Cristalización: dada su consistencia muy espesa, la miel de brezo tarda mucho en cristalizar.
Floración y cosecha
Se sabe que la miel de brezo es la última miel de la temporada . La floración del brezo comienza en invierno y continúa hasta la primavera. Pero el período de su cosecha, que varía según la altitud, puede durar hasta el otoño. Comienza a finales de julio, para regiones de gran altitud (más de 1200 m) y finaliza a finales de septiembre, a baja altitud.
Utilización de la Miel de Brezo
La miel de brezo es un producto muy especial, tanto por su aroma, su sabor y su composición . Puede consumirse solo o integrado en determinadas preparaciones saladas o dulces, como las ensaladas de frutas.
Los panaderos, por ejemplo, aprecian su aroma bastante específico y a menudo lo usan en la preparación de pan de jengibre.
Su consistencia bastante espesa hace posible e incluso ideal utilizarlo como tosta, durante el desayuno o como merienda.
Es recomendable tomar, por la mañana, 1 cucharada de miel de brezo, natural o diluida en una bebida.